¿Cuándo empezó Lionel Messi a ganar la final del Mundial de Catar 2022? ¿Con el penalti que convirtió para colocar el 1-0 en el marcador ante Francia? ¿Con ese pase mágico que abrió la jugada del 2-0? ¿O gracias al disparo desde los once metros que, cómo no, convirtió en la tanda final, cuando ya los fantasmas habían asomado a la puerta de la selección argentina, a susurrarles a él, a todos sus compañeros y aficionados, que se iban a quedar sin Copa del Mundo?
Pues, en realidad, ninguna de estas afirmaciones es del todo cierta. Porque Lionel Messi comenzó a imponerse a Francia en la final del Mundial de Catar justo antes de saltar al campo.Tal y como se enseña en nuestros cursos de fútbol online, Messi ganó la finalísima con la mentalización que llevó a cabo antes del partido, ahí, junto a sus compañeros, junto al cuerpo técnico de Lionel Scaloni. Eso fue lo que les permitió salir arrasando de los vestuarios y poner el 2-0 en el marcador antes del descanso.
Porque, y esto es una realidad que ya todo equipo de fútbol profesional ha asumido, el rendimiento de cualquier deportista está directamente relacionado con su estado mental: con la capacidad de concentración, de gestionar las emociones, o de mantener la calma en situaciones de estrés. A través de numerosos estudios y análisis, la psicología deportiva ha demostrado cuán importante es el proceso de mentalización antes de un partido o de un campeonato, y la última prueba de ello fue ese Argentina – Francia ante los ojos de medio mundo. En el fútbol, y esto se demuestra cada fin de semana, el que más fácil lo tiene para ganar es el que más mentalizado sale.
Así que si quieres saber cuáles son los trucos de los deportistas más famosos o buscas hacerte con varios trucos, de esos que te permitan salir al campo una marcha por delante de tus rivales, has llegado al lugar ideal. Porque aquí te vamos a presentar siete consejos sobre cómo mentalizarte antes de una cita deportiva.
1. Encuentra una rutina
No hay nada que relaje y combata mejor los pensamientos invasivos y negativos, esas imágenes sobre todo lo que puede ir mal en un partido, en una prueba, en un entrenamiento, que las rutinas. Porque las rutinas son eso: un flotador, un salvavidas al que agarrarnos cuando nos ataca la ansiedad, la incertidumbre, las dudas. Una serie de rituales, o movimientos, o formas de hacer las cosas que, en definitiva, nos permiten relajarnos.
Rutinas las hay de todo tipo. Por ejemplo, Messi suele darse un paseo, solo, antes y después de cada entrenamiento. Tanto él como Cristiano Ronaldo siempre quieren entrar los últimos al campo tras salir de los vestuarios. Iker Casillas, que fue compañero de este último en el Real Madrid, los superaba a los dos en manías: tenía que recortar las camisetas, darle la vuelta a las medias y trazar un surco desde la media luna hasta la línea de gol con su pie antes de que comenzase el partido. Y en otros deportes, como el básquet, hay rituales de lo más excéntrico: desde LeBron James lanzando tiza al aire, hasta Jorge Garbajosa y todas sus supersticiones.
Ya sean en grupo o de manera individual, estas rutinas previas al partido ayudan al futbolista a tranquilizarse, a encontrar la motivación necesaria, o a salir concentrado al 100%. Le permiten, en definitiva, mentalizarse antes de una gran cita.
2. Piensa en el éxito
Montiel, el lateral argentino que, con su gol, le dio el Mundial de 2022 a su país, tenía dos opciones cuando se encaminaba hacia el punto de penalti. La primera sería pensar en que lo iba a fallar, en toda la gente que iba a acabar llorando, perdida, desconsolada por un Mundial que habían tenido tan cerca; en que iba a quedar como el protagonista del fracaso. La segunda, en cambio, sería caminar, con paso firme, creyendo firmemente que lo iba a anotar. Visualizando que iba a meter el penalti. Que Argentina iba, por fin, a ganar un Mundial.
No estuvimos en la cabeza de Montiel ese día, pero estamos seguros de que por su cabeza pasaba algo más parecido a lo segundo que a lo primero. No por nada, lo metió. Y ojo, esto es pura ciencia: un estudio realizado por profesores de la Universidad de Tennessee demostró que los ejercicios positivos visuales realizados en los momentos previos del partido tenían un impacto positivo, sobre el campo, en el rendimiento de los jugadores. Si controlas las imágenes que dejas entrar en tu cabeza, antes y durante un momento clave, tendrás mucho ganado.
3. Escucha a alguien que te motive
Antes de un partido, para salir motivado, enchufado, relajado, siempre es una buena idea escuchar las palabras de alguien que te motive, que te ayude a la hora de mentalizarte. Pero, claro, ¿quién es esa persona? ¿Quién tiene capacidad para decir la palabra correcta en el momento necesario?
En numerosas ocasiones, serán los entrenadores los que tengan la palabra exacta, el discurso perfecto para encontrar un equilibrio entre la distensión y la concentración máxima. Y ahí, como nadie, se nos viene a la cabeza el ejemplo de Luis Aragonés, cuyas charlas antes de la Eurocopa de 2008 son ya míticas. Una mezcla de risas para relajarse, charla técnica y dosis de motivación.
Pero si la especialidad de tu entrenador no son las charlas motivacionales, o estás solo y sin compañía antes de realizar una prueba, siempre puedes encontrar otros referentes. Jonas Vingegaard, ciclista ganador del Tour de Francia 2022, lo primero que hacía al cruzar la meta después de cada etapa era llamar a su mujer. Otros, antes de salir al césped, se ponen vídeos de jugadores o entrenadores a los que admiran.
Cada uno es un mundo, pero lo que está claro es que las palabras tienen la capacidad de sanar, de espantar nuestros miedos más profundos. Y también, claro, de mentalizarnos para salir al campo al 200%.
4. Dialoga contigo mismo de manera positiva, háblate bien
Pero hay muchos momentos previos a una cita importante —un partido, un primer entrenamiento con tu nuevo equipo, o, por qué no, una de nuestras pruebas para acceder a equipos de fútbol semiprofesionales— en los que tendrás que aprender a convivir contigo mismo, con tu cabeza. Y, ahí, no hay entrenador o charla motivacional que valga. Por lo tanto, ¿qué se puede hacer ahí para mantener una buena mentalización?
Lo principal, creemos, es hablarse bien, respetarse, creer en uno mismo. Puede parecer una obviedad, pero el futbolista que opta por esta vía —por decirse lo que ha hecho bien en el último partido, corregirse de una manera positiva y creer que está ahí por su propio mérito— tiene muchas más papeletas para salir mentalizado y seguro de si mismo ante el reto que le viene.
En los momentos de soledad antes de la cita, no hay como intentar ser el mejor compañero posible para nosotros mismos. Una regla básica de todo futbolista.
5. Mantente activo
Tras la final de Roland Garros de 2022 entre Rafa Nadal y Casper Ruud, en la que el español se hizo con su decimocuarto trofeo de Roland Garros —seis más que el segundo en toda la historia, ahí es nada—, se hizo viral un vídeo con ambos tenistas esperando a que se les diese la entrada en la pista. Y en él, mientras Ruud esperaba tranquilamente, estático, se veía a un Nadal que no paraba: esprines, balances, calentamiento, mucha actividad.
Después de su derrota, cuando le cuestionaron por las imágenes del vídeo, Casper Ruud reconoció que, quizás, su maestro ya había comenzado a ganar la final antes del primer punto con esa guerra psicológica. Con esa manera insuperable de mantenerse activo antes de salir a la pista.
Tenlo, pues, en cuenta: si uno de los mejores deportistas de la historia se mentaliza manteniéndose activo antes de una gran cita, puede que sea una buena idea aprender de él.
6. Crea tu propia lista de reproducción
Esta es obvia, ¿no? ¿Porque qué futbolista o profesional de cualquier otro deporte no cuenta ya con sus propias canciones, ya sea para escuchar solo y concentrándose, o para poner en el bus del equipo?
Lo que tienes que hacer es escoger tu propio estilo, lo que más te transmita aquello que necesitas antes de salir a la cancha: reggae para relajarte, un poco de rock o punk para ponerte las pilas, música electrónica para centrarte, cumbia o reggaetón para bailar y echar unas risas.
Ya lo contó Marca hace unos años: cada estrella del fútbol tiene su estilo particular predilecto, y no les ha ido nada mal a ninguno de ellos.
7. Busca tu modelo a seguir
Luego de todos estos consejos, dejamos para el final el más importante de todos: el de que busques tu propio modelo a seguir, el deportista cuyas rutinas y formas de actuar antes de una cita a la que tienes que salir 100% mentalizado se te adapten mejor. Uno cuya ética de trabajo, su compromiso con el deporte, su manera de hacer las cosas te transmita esa fuerza y esa concentración que necesitas.
Para muchos, esa figura ha sido Kobe Bryant, probablemente uno de los atletas más comprometidos con su deporte que se ha conocido en lo que va de siglo. Sus historias son múltiples: otras estrellas que se lo encuentran entrenando a las cuatro de la mañana y luego, otra vez, a las ocho; ni un solo día de descanso; una motivación constante y sin fin para ser el mejor.
La figura de Kobe no tiene por qué ser la que mejor se te adapte, pero igual que él ha inspirado a muchos y muchas, sería buena idea que tú encontrases tu modelo a seguir. Al menos, hasta que puedas volar solo.
Conclusión: la mentalización, un aspecto clave para las citas más importantes
Por supuesto, más allá de estos siete puntos, la experiencia te irá permitiendo conocer cuáles son tus aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de prepararte para un partido o una cita deportiva importante. Lo que queda claro, eso sí, es la importancia de la psicología deportiva en la mentalización para un partido.
En parte por ello, hemos creado nuestro propio curso online de psicología deportiva. Porque creemos que, sin un proceso de mentalización y de trabajo psicológico correcto, cualquier otro aspecto técnico o táctico del fútbol no será completo. Y es que se puede ser muy bueno con el balón en los pies y conocer cada detalle de cada táctica que se pone en juego en un partido, pero si la cabeza no está centrada y mentalizada para afrontar el reto, toda esa habilidad queda en un segundo plano.