En anteriores entrevistas hemos hablado con psicólogos y entrenadores de los muchos aspectos que inciden en el rendimiento deportivo. Cada jugador tiene su rol y cada posición del campo necesita una perspectiva diferente del juego y, por tanto, diferente preparación y entrenamiento. Es la combinación de todos esos puntos de vista lo que ha ayudado a crear los modernos métodos de entrenamiento que se utilizan en los grandes clubes de la actualidad.
Para seguir progresando en este campo, en esta última entrevista queríamos conocer el punto de vista de alguien que ha pasado gran parte de su vida jugando al fútbol, desde que era un joven jugador inexperto, hasta convertirse en un afamado jugador profesional y, en la actualidad, un respetado entrenador. Nuestra búsqueda de una persona que cumpliera esos requisitos nos llevó hasta el entrenador profesional Manel Expósito.
Como jugador, Manel Expósito fue un gran referente del FC Barcelona B y jugó en seis ocasiones con la camiseta del primer equipo. En 2003, él y un aún prometedor Lionel Messi realizaron su debut profesional en un partido amistoso contra el FC Porto. Más tarde, después de militar en las filas del Atlético de Madrid, Manel pasó cuatro años jugando en la segunda división y segunda división B de la liga española, antes de que su carrera profesional le llevará al otro lado del mundo, concretamente a jugar en el equipo Auckland City FC. Allí ganó tres veces la Liga de Campeones de Oceanía, jugó en dos Copas Mundiales de Clubes en Japón y ha ganado en dos ocasiones la Bota de Oro de Oceanía.
Cuando su éxito comenzó a reducirse, Manel decidió que era momento de volver a Europa y se trasladó a Bélgica para jugar en el Kas Eupen, donde ayudó a guiar al equipo en dos play-offs y a escalar posiciones dentro de la Liga de Bélgica Profesional antes de colgar definitivamente las botas de fútbol. El club no perdió el tiempo y poco después ofreció a Manel el puesto de entrenador junto a su compatriota Jordi Condom.
A nivel personal, Manel estudió Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, especializándose en fútbol de alto rendimiento, además de tener un Máster en Coaching y Psicología del deporte. También cuenta en su currículo con la prestigiosa Licencia de Entrenador Profesional emitida por la UEFA.
Actualmente, Manel está disfrutando de su segundo año como asistente de entrenador en el Kas Eupen, donde también realiza los análisis tácticos. El año pasado el club ascendió de categoría y actualmente compite en la Primera división de Bélgica, la Belgium Pro-League.
Entrevista con el entrenador profesional de fútbol Manel Expósito
Hola Manel, gracias por hacer un hueco en tu agenda y hablar con Ertheo.
Has jugado bajo las órdenes de muchos entrenadores durante tu carrera futbolística y ahora mismo te has convertido en uno de ellos. ¿Qué rangos de edad has entrenado y a qué nivel?
He de decir que no tengo mucha experiencia como entrenador porque terminé mi carrera como profesional hace tan solo dos años. Sin embargo, he entrenado a algunos clubes españoles en sus categorías infantil y alevín y también trabajé como entrenador en Nueva Zelanda con niños de 14 años. El año pasado, como asistente de entrenador, dirigí a jugadores profesionales (incluyendo a mis ex compañeros) de la segunda División de Bélgica y este año, después del ascenso del equipo, he entrenado a jugadores de la Primera División.
¿Cómo te ayudó tu experiencia como jugador para ejercer de entrenador?
Cuando aún era jugador profesional en activo trabajé con niños en academias de todo el mundo, pero comencé a entrenar al más alto nivel un tiempo más tarde. Por supuesto, mi experiencia como jugador me ayudó muchísimo a la hora de entrenar, junto con el hecho de que siempre me ha gustado el estudio de las tácticas de juego y como aplicarlas correctamente. Aprendí mucho durante mis estudios y cuando competía como jugador.
¿A qué edad empezaron a ser importantes tus habilidades técnicas y tácticas cuando aún eras un jugador no profesional?
Como mis comienzos fueron en las categorías inferiores del FC Barcelona, empecé a entrenar mis habilidades técnicas muy temprano y, poco a poco, fui desarrollando mi capacidad táctica durante mis años como profesional.
Lógicamente, cualquier jugador necesita comenzar a entrenarlas progresivamente, aprendiendo primero A, luego B y después C. Las habilidades técnicas vienen primero y son la base que nos permite llegar a trabajar la táctica. Sin tener las habilidades técnicas completamente desarrolladas, un jugador no puede seguir progresando y, si le exigimos mejores habilidades tácticas y un mayor rendimiento, no será capaz de dárnoslo ya que no sabrá hacer un buen pase o su control será deficiente.
Así, todas las habilidades tácticas no son útiles si un jugador no puede jugar al fútbol con al menos un nivel mínimo de habilidad técnica. En mi opinión, las habilidades más técnicas se desarrollan a una edad más joven y las habilidades tácticas más complejas se van aprendiendo progresivamente más adelante.
¿Cuántas horas a la semana entrenaste cuando eras un jugador juvenil? ¿Cuántas recomendarías que lo hiciera un jugador joven?
Siempre me ha gustado mucho jugar al fútbol, por lo que normalmente entrenaba incluso cuando no lo hacía con mi equipo, en España solía jugar al fútbol en la calle todo el día. En general, las horas de entrenamiento dependen de la franja de edad del jugador, pero se debería empezar con dos días a la semana cuando eres un niño. Sin embargo, si quieren llegar a lo más alto, yo recomendaría que los niños entrenen como mínimo tres días a la semana más algún otro día de partido. Pero, como ya he dicho, todo depende de si estamos hablando de competiciones escolares o profesionales. Por desgracia hay que tener muchos sacrificios para convertir el futbolista profesional, pero que al final merecen la pena.
¿Qué ejercicio de entrenamiento disfrutabas más cuando eras jugador?
Como delantero, por supuesto disfruté de los ejercicios de lanzamiento y remates, pero también lo hice aprendiendo tácticas y trabajando en mejorar mis habilidades individuales. Cuando realmente te gusta el fútbol te encanta todo tipo de entrenamientos sin excepción. Especialmente cuando eres joven y ambicioso y quieres aprender tanto como sea posible. En mi vida profesional como jugador, la pelota siempre ha estado presente en mis entrenamientos.
¿Qué ejercicio de entrenamiento disfrutas más ahora como entrenador?
Como entrenador es diferente porque a veces tienes que trabajar más la parte táctica, especialmente en las categorías superiores. Pero es importante trabajar también otros aspectos del juego. Personalmente, me gustan los ejercicios de posesión y los partidos en campos pequeños de fútbol 7, llenos de competitividad e intensidad. Pero también es importante trabajar con ejercicios tácticos generales en los que mejorar todos los aspectos del juego a la vez y entrenar con las mismas distancias y sprints que encontrarías en un partido de primera división.
Cada ejercicio que proponemos en el entrenamiento puede ser sorprendente cuando los jugadores tienen la disposición adecuada y juegan con gran intensidad. Un entrenador puede proponer un ejercicio fantástico y divertido, pero si los jugadores no están interesados ??y motivados, no valdrá de nada.
¿Tu desarrollo personal (confianza, autoestima, etc.) ha tenido un efecto directo sobre tu capacidad deportiva como jugador? Y, de ser así, ¿en qué ha afectado a tu forma de entrenar actual?
Por supuesto que sí ha tenido efecto. Cómo soy como persona y cómo era como jugador repercute en cómo soy actualmente como entrenador. Si en tu vida personal eres ambicioso y trabajador, entonces te convertirás en ese tipo de entrenador. Si, por el contrario, tiendes a ser negativo, también repercutirá en tu forma de entrenar.
La confianza en uno mismo y el trabajo duro son la clave en cualquiera de los casos, no sólo en el mundo del coaching, sino también en la vida cotidiana de cualquier persona.
¿Has notado una gran diferencia en las técnicas de entrenamiento entre los diferentes países en los que has jugado y entrenado al fútbol?
En mi carrera profesional siempre he trabajado con entrenadores españoles, así que no puedo dar mi opinión sobre otras técnicas de entrenamiento. Pero, obviamente, hay muchas diferencias culturales entre países, por lo que lo mismo ocurre en el fútbol.
Cada país es diferente y sus métodos de entrenamiento e ideas acerca de cómo debe jugarse al fútbol también lo son. Eso es algo que puede verse en cada partido y cada equipo. Es fácil encontrar muchas diferencias entre la liga inglesa y la liga española, por ejemplo, y entre estas y otras ligas del mundo.
Formarse, entrenar y jugar en diferentes países y culturas, ¿puede ayudarte a mejorar como jugador?
Claro que ayuda, pero no sólo como jugador. En el aspecto más personal, experimentar todo eso también te ayuda a desarrollarte: desde saber cómo manejar situaciones difíciles hasta cómo lidiar con las barreras del idioma. Ser capaz de vivir en diferentes países y ciudades y experimentar diferencias culturas y ligas me ha ayudado mucho tanto en mi vida personal y como profesional. Algunas de las mejores experiencias me han sucedido lejos de mi ciudad natal y lejos de los lugares donde crecí.
Cuando eras joven, ¿eras un jugador muy disciplinado con tu alimentación y llevabas un estilo de vida responsable y saludable?
Cuando eres joven es muy importante comer bien y mantenerse sano. La alimentación es el combustible para el cuerpo, por lo que es necesario mantener una dieta equilibrada y un estilo de vida que permita la recuperación del cuerpo tras los entrenamientos. Esto significa dormir las horas necesarias y no tener malos hábitos, como son fumar o beber alcohol.
A este comportamiento lo llamamos «entrenamiento invisible» y es muy importante en términos de prevención de lesiones y para asegurar que el jugador está en perfectas condiciones para dar el mayor rendimiento tanto en los entrenamiento como en los partidos.
Hablando de lesiones, ¿tuviste algún problema de lesiones importantes cuando eras un jugador joven? Y, si es así, ¿cómo afectó esto a tu desarrollo?
Sí, por desgracia tuve varias lesiones. Me rompí el quinto metatarsiano del pie derecho dos veces y me tuvieron que operar en ambas ocasiones. Esto sucedió justo al principio de mis mejores años como profesional, cuando estaba jugando en el FC Barcelona B y acababa de hacer mi debut con el primer equipo. La verdad es que me rompí el pie en un entrenamiento con el primer equipo. Después de eso no volví a jugar en él. No puedo decir con certeza que la lesión fuera la razón de no volver a jugar allí, pero si es cierto que afectó a mi rendimiento y mi progresión en el momento más importante de mi carrera.
Esta experiencia me hizo aprender mucho y me enseñó a enfrentarme a la frustración. Me di cuenta de que el fútbol era muy importante pero que también lo era tener algo más en la vida aparte del deporte, un plan B por lo que pueda suceder. Estudiar un grado puede darte otras opciones y ayudarte también a crecer personalmente.
¿Qué consejos puedes dar como entrenador para ayudar a los jugadores jóvenes a evitar las lesiones?
En los entrenamientos no solo se trabaja el físico, también realizamos muchos ejercicios para prevenir las lesiones, principalmente antes de comenzar los ejercicios más duros. Cada jugador debe tener un plan adaptado a sus características -basado en su historial de lesiones anteriores- para ayudar a prevenir otras lesiones o que le ayude a recuperarse de las que ya tenga. Para un entrenador es muy importante comunicarse directamente con el personal médico, cada día, antes de comenzar los entrenamientos. Así sabrá qué jugadores están más cansados ??o tienen los músculos más doloridos y podrá adaptar la carga de entrenamiento a las necesidades del jugador y del juego.
¿Sientes que la suerte ha jugado un papel esencial en tu carrera? Y, si es así, ¿en qué sentido?
En el fútbol y en la vida no creo en la suerte, pero si creo en la «buena suerte». Si realmente trabajas duro, eres positivo y proactivo, entonces es muy probable que te pasen cosas buenas, ya que las buscas y luchas por ellas.
Creo que todo sucede por una razón, como por ejemplo mi lesión, que me ayudó a ser la persona que soy hoy en día y propició que jugara dónde he jugado y tuviera las experiencias que tuve en el fútbol y en la vida.
Creo que si te quedas en casa y te quejas de las cosas, nada bueno te sucederá y la suerte no estará de tu lado. La realidad es que tienes que salir y trabajar duro todos los días para que comiencen a suceder cosas nuevas.
¿Qué consejo le darías a un jugador de 16 años que aspira a convertirse en profesional?
Mi consejo es simple: debe creer en sí mismo, entrenar duro y nunca rendirse. Debe trabajar y confiar en que, al final, todo saldrá bien. Además, también le aconsejaría que estudie y potencie su desarrollo personal, formándose y aprendiendo nuevos idiomas. Y, sobre todo, que no sólo se centre en el fútbol porque la vida tiene muchas más cosas que ofrecerle.
Y para terminar, una última pregunta: ¿crees que participar en un campamento de fútbol puede jugar un papel importante en el desarrollo de un jugador joven?
Rotundamente sí. Entrenar en un buen campamento de fútbol con los mejores entrenadores profesionales es siempre una buena idea, especialmente si se realiza durante días festivos y vacaciones escolares. Los campamentos de fútbol también son muy divertidos y ¡siempre es bueno disfrutar de este deporte y de la vida en general!
Puedes seguir a Manel Expósito en su Twitter: @Xinoexposito.
En el fútbol existen otras profesiones muy interesantes que quizá no llamen tanto la atención, como el trabajo de representante de futbolistas. Una persona que está dentro del gremio, Samuel Gómez, no cuenta los secretos y cómo llego al mundo de los despachos en el fútbol en una entrevista que nos concedió a Ertheo.
Si deseas recibir más información sobre campamentos de fútbol, no dudes en contactar con nosotros en el (+34) 951 204 061.