No cabe duda que llegar a la elite implica una serie de sacrificios que no todos los jóvenes deportistas pueden o quieren afrontar. La competencia es muy dura y hacerla frente exige un alto grado de disciplina. Disciplina que pasa por dietas estrictas, intensas sesiones de entrenamiento, y sus correspondientes e imprescindibles jornadas de descanso.
Como consecuencia de ello, los jóvenes deportistas a menudo tienen que renunciar a pasar tiempo con sus amigos, con sus familias y, en muchos casos, también tienen que dejar de lado los estudios. En definitiva, tienen que renunciar a llevar una vida normal.
La consecución de sus sueños es su máxima recompensa junto con la satisfacción personal que supone superar los distintos retos a los que tienen que hacer frente.
¿Qué sacrificios tiene que hacer un deportista para llegar a la elite?
Los jóvenes deportistas y sus familias tienen que afrontar muchos sacrificios. El camino para llegar a la elite es largo y duro, y, a menudo, por el camino, los jóvenes tienen que renunciar a una parte importante de su infancia y adolescencia.
Por supuesto, los sacrificios varían considerablemente según la disciplina deportiva. En cualquier caso, los más comunes son los siguiente:
- Renunciar a gran parte de su tiempo libre.
- Renunciar a pasar tiempo con sus amigos y familiares.
- Vivir lejos del hogar familiar.
- Seguir dietas muy estrictas.
- No poder dedicar suficiente tiempo a los estudios.
- No disponer de tiempo para actividades de ocio.
Además, las duras dinámicas de entrenamiento y la alta exigencia de las competiciones pueden producir secuelas físicas, mentales y emocionales si no se afrontan de la forma adecuada.
Los sacrificios de las familias
Las familias de los jóvenes deportistas también tienen que hacer importantes sacrificios. Para empezar, habitualmente, tienen que renunciar a pasar mucho tiempo con sus hijos. Renuncia que, a menudo, se acrecienta según el deportista va acercándose a la profesionalidad.
Las carreras de los jóvenes deportista también suelen requerir de una importante inversión económica que muchas veces tienen que financiar las familias. Una inversión económica que con frecuencia es doble, ya que seguirles cuando compiten en campeonatos regionales, nacionales e incluso internacionales supone afrontar costosos viajes.
¿Qué deportes exigen más sacrificios a los jóvenes?
Evidentemente, no todos los deportes exigen los mismos sacrificios a los jóvenes. La preparación necesaria para alcanzar la elite en un deporte como el ajedrez no es la misma que en la gimnasia rítmica o en el fútbol. No en vano, la preparación que precisa cada deporte es diferente, como también lo es la recompensa que se obtiene.
Algunos de los deportes que tienen fama de ser más exigentes para los jóvenes son la gimnasia rítmica, el ciclismo y la natación, con especial mención, a la natación sincronizada. Por supuesto, sin olvidar el atletismo y el tenis.
Algunas disciplinas deportivas añaden al sacrificio que ya de por sí tiene su práctica, un elemento adicional, la soledad. Este es el caso, entre otros, de los nadadores y los corredores de disciplinas de fondo, quienes con frecuencia tienen que afrontar las largas sesiones de entrenamiento con la única compañía de sus pensamientos.
Estrategias para evitar que los jóvenes deportistas acaben “quemados”
En primer lugar, a la hora de plantear un programa de formación de un joven deportista, es fundamental tener claro que un niño no es un adulto en miniatura. Se trata de una persona que está en proceso de serlo. De hecho, el proceso es bastante largo.
Es cierto que para la práctica deportiva de elite resulta fundamental un inicio temprano. Sin embargo, no por ello, este inicio temprano tiene que implicar el sacrificio del futuro deportista y, muchos menos, de la persona.
La clave de un entrenamiento inicial de un deportista infantil debe sustentarse en el aprendizaje. Y a partir de ahí construir la práctica deportiva y la disciplina necesaria para ello. Además, es recomendable que en la formación de los jóvenes deportistas prime la parte lúdica de la práctica. A fin de cuentas, el juego es algo natural en los niños y es un elemento fundamental de cualquier proceso de aprendizaje.
La motivación, a través tanto de la diversión como del deseo de mejorar, ayudan a afrontar el esfuerzo y los sacrificios que implican la práctica deportiva de alto nivel, y son la mejor forma de lograr la excelencia.
Además, en el proceso de formación de un joven deportista resulta fundamental facilitar al niño y a su familia toda la información disponible.
En ese sentido, las academias deportivos de alto rendimiento como los de Ertheo son una excelente forma de combinar un entrenamiento de alto rendimiento con una experiencia de vida. Y lo son porque tienen un enfoque formativo, educativo y también personal. Además, en estos campamentos los niños tienen la oportunidad de relacionarse con otros jóvenes deportistas y así compartir experiencias.
La importancia del apoyo de la familia y de los entrenadores
El apoyo familiar y de los buenos entrenadores resultan fundamentales en el proceso de formación, y en el desarrollo del talento del niño y del adolescente. De hecho, tienen una relación muy significativa con el rendimiento de los deportistas (no solo de los más jóvenes). Es fundamental no presionar en exceso al niño o adolescente ni exigirle más de lo que puede llegar a dar. Los sacrificios pueden ser inevitables, pero siempre deben ser asumibles. De lo contrario, pueden llevar al abandono de la práctica deportiva.
No son pocos los casos de deportistas cuyo rendimiento se ve afectado negativamente cuando pasan por momentos personales y por situaciones familiares complicados. Por supuesto, los efectos de estas situaciones se amplifican en el caso de los niños y los adolescentes, ya que aún están en pleno proceso madurativo.
La importancia del adecuado apoyo psicológico
También resulta fundamental ajustar la exigencia al desarrollo psicológico del joven deportista. En ese sentido, puede ser de gran ayuda ofrecer al deportista el apoyo psicológico profesional que pueda necesitar.
Los jóvenes deportistas tienen que lidiar con altos niveles de presión. Las altas expectativas, la presión de la competición y, por supuesto, las consecuencias del fracaso o del rechazo conllevan una fuerte carga emocional. Por eso, contar con la ayuda de un psicólogo deportivo puede aportar grandes beneficios a la carrera deportiva de los niños y los adolescentes.
Conclusión
Los jóvenes deportistas deben afrontar una gran variedad de retos en su camino por convertirse en deportistas de elite. Estos retos implican una serie de sacrificios que los niños y los adolescentes no pueden afrontar solos. Por eso, resulta fundamental tanto el apoyo de sus familias como de los entrenadores. También es conveniente que los jóvenes deportistas reciban apoyo psicológico profesional.
Por supuesto, todos los sacrificios deben ser asumibles. Un grado de exigencia desmesurado siempre resulta contraproducente. La historia del deporte está plagada de ejemplos de jóvenes deportistas que deciden renunciar a hacer del deporte su vida y que deciden que no todo vale para llegar a la elite.
Referencias
La Natación es uno de los deportes más exigentes y sacrificados
https://www.lasnoticiasdecuenca.es/deportes/gimnasia-ritmica-deporte-del-sacrificio-y-belleza-29227
¿Cuáles son los principales sacrificios para ser futbolista profesional?
https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1578-84232017000300026
https://ctxt.es/es/20160810/Deportes/7644/deporte-elite-exigencia-presion-Fregant-el-cel.htm
https://www.bbc.com/mundo/deportes-41306964
https://www.personales.ulpgc.es/fguillen.dps/docs/El_estres_de_los_jovenes_deportistas.pdf